Pues lo que yo vi es que "el mundo de las criptomonedas" era un lugar feliz, estábamos bien lidiando con nuestros problemas y nuestro "fanatismo", hasta que llegó el mainstream y atrajo el insaciable apetito del estado, ahora hay peligros y amenazas por todos lados: prohibiciones, regulaciones, legislaciones, tributaciones... casi que prefiero que seamos aquí un puñado de frikis raros,
Si solo nos quedamos en un puñado de frikis raros no vamos a tener forma de gastarnos nuestros bitcoins. Vamos a tener unos bits que no sirven para nada.