no implica que obligatoriamente las billeteras deban igualmente encontrarse online a disposición del estafador de turno. Tampoco que deban quedar obligatoriamente en manos de terceros (plataformas de exchange, depositarios, etc.) para poder dormir relativamente tranquilos.
Estoy de acuerdo con casi todo, pero no entiendo ¿por qué se demoniza tanto el hecho de que la billetera se queda en manos de un tercero? Una empresas o un individuo puede proporcionar ciertos servicios, como almacenamiento, sincronización y custodia de la billetera. ¿Qué tiene de malo? A mi parecer resuelve perfectamente el problema de que los usuarios no tienen ni idea de la parte técnica.